lunes, 10 de mayo de 2010

Labios rojos (final)

Pensamiento 3

Es de noche y aun son las seis de la mañana, el primer cigarrillo ya se ha consumido,
y el primer renglón se ha terminado, de fondo se oye la misma triste canción , y yo sigo escribiendo esto sin hallar sentido, enciendo el segundo cigarrillo, quizá debería dejar de fumar o quizás debería dejar de escribir, que demonios estoy pensando si necesito de ambos para vivir, ha llegado mi camión y la taquicardia ya empezó, el mismo tramo de siempre, la misma rutina diaria, la misma señora con su niño en brazos, el niño malhumorado, la aprendiz de puta pretendiendo ser venerada, he llegado a tu esquina, esa esquina de mi obsesión, se que un día de estos me ha de llevar a mi perdición, se ha roto la punta de mi lápiz, lo he arrojado por la ventana, encuentro un bolígrafo para poder continuar, no puedo negar que me gusta tu manera de andar y tus labios al hablar, no puedo negar que he fantaseado contigo en mas de una ocasión y que te hago mía con cada renglón, que en ocasiones daría mi pluma y mi cigarro por un poco de ti, seguimos con la misma historia de princesas y dragones, la misma del mendigo sin fe, la del cobarde que te escribe cosas que no has de leer, te has bajado una vez mas de aquel autobús, pero antes volteaste a ver si sabia que eras tu, he decidido no escribirte mas y este sera el pensamiento final, he decidido no dejarte ir y hacértelo saber, que me gusta tu manera de andar, de reír y de hacerme
escribir.

"Lo peor del amor es cuando pasa,
cuando al punto final de los finales
no le quedan dos puntos suspensivos…"

No hay comentarios: